El Desierto
El Desierto
En un mar de arena sin fin ni nombre,
el sol abrasa cada cual que asombe;
sin más testigo que el viento sutil,
en el desierto, vive el calor febril.
Las dunas se alzan como gigantes,
guardando secretos de antiguos amantes;
en el dominio de la sequía y el calor,
yace el murmullo de quien fue mejor.
En la quietud del vasto manto árido,
la vida persiste, callada y válida,
cactus erguidos y escorpiones huraños,
resisten el fuego de los soles extraños.